La respuesta es SI. Además, la contratación del seguro de responsabilidad civil debería ser obligatoria cuando uno se da de alta como autónomo. Para determinadas actividades como, por ejemplo electricista o instalador de gas, es obligatorio para darte de alta en Industria. Sin embargo, hay otras actividades que no obligan a su contratación y esto, a nuestro parecer profesional, es un error garrafal. Si eres autónomo respondes con todo tu patrimonio en el caso de tener que indemnizar a una persona si te denuncia y sales responsable de los daños causados por tu trabajo. Y estamos hablando de que un seguro de responsabilidad civil para autónomos lo encontramos por alrededor de 150 € al año.
Por supuesto, este tipo de seguros no está concebido para pequeñas indemnizaciones de 100, 200 o 300 €, sino que está preparado para cubrirte frente a indemnizaciones de mayor calado que pueden afectar gravemente a tu patrimonio: 10.000, 30.000, 70.000 €, etc. De ahí que todos los seguros de responsabilidad civil cuenten con una pequeña franquicia que permite a la aseguradora quitarse de encima las pequeñas indemnizaciones y centrarse en las grandes, a la vez que consigue abaratar de forma enorme las pólizas.
Muchos son los clientes que nos llaman solicitándonos un seguro de responsabilidad civil sin franquicia porque lo confunden con el seguro del coche. Recordemos que existe una forma de seguro de autos a todo riesgo con franquicia que abarata la póliza frente a la de sin franquicia a la hora de dar un parte por daños a nuestro vehículo. Es decir, que la aseguradora no cubre si el gasto de reparación del vehículo propio es menor que la franquicia contratada. Sin embargo, son seguros diferentes, si bien el seguro de autos tiene una cobertura de responsabilidad civil incluida (seguro obligatorio de vehículos a motor) el seguro de responsabilidad civil para nuestra actividad profesional, cubre los daños ocasionados a terceros y no los daños propios sufridos.
Somos especialistas en seguros de responsabilidad civil para autónomos y trabajamos con la gran mayoría de todas las aseguradoras, por lo que tenemos una visión perfecta de los productos que ofrecen las aseguradoras. No hay nada novedoso o radicalmente diferente entre unas aseguradoras y otras. Prácticamente ofrecen las mismas coberturas y su diferencia principal radica en dos parámetros fundamentales y muy importantes: la prima a pagar y, sobre todo, la atención siniestral. Y no nos engañemos, un seguro es bueno cuando llega el siniestro y nos atienden correctamente y dan solución rápida a nuestros problemas. Puede ser muy barato pero si luego nos ponen trabas cuando aperturamos un siniestro, habremos pagado dinero para nada. Vale la pena pagar un poco mas y tener la seguridad de que cuando algo ocurra todo sea mucho mas sencillo. En esa labor ayuda mucho tener la póliza contratada con nosotros. Tampoco hay que llevarse a engaño, pues ya hemos dicho que un seguro de responsabilidad civil no es un seguro de autos a todo riesgo. Tiene sus exclusiones y es mucho mas fácil si nos dejamos aconsejar por profesionales como nosotros.
(Fotografía © Candado Bajo Licencia CreativeCommons SA (2014))
