Recientemente, como cada año, se ha hecho publico un estudio sobre la demanda de seguros sobre responsabilidad civil de consejeros y administradores de empresas relativo al año pasado 2011 lo que en la jerga aseguradora se llama D&O (Directors and officers).
¿Como es posible que con los tiempos que corren de cierres de empresas, de concurso de acreedores, de quiebras, los Consejeros y Administradores no hagan cola frente a las corredurías de seguros (y digo expresamente corredurías, no compañías) para buscar el mejor seguro del mercado para su contingencia de tener que responder hasta con su propio patrimonio frente a negligencias en la gestión de los negocios que ellos administran?.
Es incomprensible que los ejecutivos del siglo XXI sigan teniendo la tan poca perspectiva del riesgo que tenían los del siglo pasado. Y es penoso que se nos presenten en las oficinas a solventar sus problemas cuando todo está ya condenado (a veces nos preguntan si no se puede hacer la póliza con efecto retroactivo para antes de haber entrado en concurso). Solo se acuerdan de Santa Bárbara cuando truena y la tempestad devasta. Y eso que se trata de personas enteradas, son ejecutivos de empresas que se supone tienen un nivel de conciencia y cultura de riesgo mayor de la media de la población.
Es muy triste que ante hechos consumados tengamos que decirle al ahora interesado en el seguro que debía habérselo hecho antes de ocurrir el siniestro. Se trata de prevenir el siniestro no de llorar cuando ya ha sucedido.
La legislacion es muy clara…. Hay fundamentalmente 4 tipos de acciones que puede generar la responsabilidad civil de administradores:
- 1 - acción social (que puede ser ejercitada por los socios o accionistas de la sociedad, por daños causados a la misma cuando el administrador ha incumplido sus labores de lealtad y diligencia);
- 2 - la acción individual (ejercitada por accionistas o acreedores, por daños sufridos directamente en su patrimonio por un acto puntual); y
- 3 - la acción por deudas (ejercitable cuando una sociedad tiene deudas que dejan el capital por debajo del 50% de su patrimonio),
- 4 - y la responsabilidad concursal (únicamente ejercitable por los administradores concursales).
Y, sin embargo, y a pesar de que al parecer en los últimos cuatro años, el incremento acumulado de la siniestralidad ha alcanzado el 110%, lo que da una idea del impacto que ha tenido la crisis en el seguro y se han pagado siniestros un 10% más que primas recaudadas, lo que significa que las compañías pagan más que lo que recaudan, seguimos sin tener la demanda que se suponía deberíamos tener.
Las empresas (y/o sus directivos) no Ibex, al parecer van irrumpiendo lentamente en el mercado de demanda como nuevas compradoras de esos seguros ya que el 48% de las sociedades sin cotizary el 28% de las Pymes, se han incorporado a ese mercado, pero muy lejos de las medias de aseguramiento en pólizas de particulares como serían hogar, autos, etc. Que están en el orden del 70, 80%. ¿Es que los directivos de nuestras empresas tienen menos previsión que la mayoría de la población?. No, nosotros creemos que somos los aseguradores los que no hemos sabido llegar a ese mercado. Y por eso este mi toque de arrebato.
Las corredurías intermediamos más de la mitad de las pólizas contratadas. Y una vez más debemos reivindicar nuestro papel frente a las compañías y bancaseguros porque somos nosotros los que conocemos todas las alternativas de aseguramiento posible del mercado. Si el cliente va a que el banco le suscriba el seguro de responsabilidad civil se pone en manos de una sola alternativa, la que le interesa al banco; si va directo a la compañía se pone en manos de un solo producto. Si va a la correduría le da todas las alternativas del mercado. USTED ESCOGE.