Consorcio y vehículos: los riesgos extraordinarios
Ya ocurrió en el atentado de ETA en Barajas.
Únicamente los vehículos con alguna cobertura de daños propios (terceros con lunas o robo y por supuesto los “todo riesgo”) se vieron indemnizados por el Consorcio de Compensación de Seguros. Los que no tenían seguro o tenían el básico de Responsabilidad Civil se vieron sin indemnización alguna con la correspondiente indignación por parte de sus propietarios. ¿Lógico? Por supuesto.
Contratar alguna o todas las coberturas de daños propios supone PAGAR dentro de la prima total que nos cobra la compañía el impuesto a favor del Consorcio para riesgos extraordinarios por lo que parece natural pensar que únicamente pueden beneficiarse de dicha garantía las personas que lo pagan.
No podemos olvidar, y para eso escribo estas líneas, que el Consorcio es un organismo con personalidad jurídica propia que se nutre de sus propios ingresos mediante la recaudación a través de las primas de seguro. ¡¡¡¡¡Sería impensable entender que una Compañía de Seguros cualquiera nos abonara una indemnización sin haber contratado una póliza!!!! Pues esto es lo que sucede con el Consorcio de Compensación de Seguros.
Hoy nos despertamos con la noticia de que todos los coches (que estén asegurados, claro) estarán protegidos ante riesgos extraordinarios (un terremoto, una inundación, un embate del mar o un acto terrorista –entre otros-) independientemente de la cobertura contratada.
¿Cómo? Muy sencillo, el recargo que se paga al Consorcio a través de las primas que pagamos a la Compañías de Seguros irá hasta en la cobertura básica de Responsabilidad Civil y de este modo, tanto los que contraten daños propios como los que no lo hagan, se verán resarcidos por este Organismo en el supuesto de que se vean afectados por algún riesgo susceptible de ser cubierto.
Perfecto. De esta manera, todas las personas se verán protegidas ante una eventualidad de tal magnitud y ya no se argumentará “a mí nadie me explicó esto”. Y a pesar de esta novedad, aconsejamos contar siempre con un corredor de seguros que nos asesore en todo momento para cubrir aquellos riesgos que no van a estar asegurados por defecto como este nuevo caso.